Afganistán es un país con una población mayoritariamente musulmana. Aunque, esto ha venido cambiando con el paso de los años. Sobre todo, desde que el régimen de los talibanes se ha extinguido y ha llegado un periodo de relativa calma y libertad.
A pesar de la importante tradición musulmana en este país, esto no ha hecho imposible un aumento en las conversiones al cristianismo en Afganistán. Muchos ciudadanos están viendo en la fe cristiana, una forma de vida pacífica.
Conversiones al cristianismo de la mano de las hermanas
Las Pequeñas Hermanas de Jesús, son unas religiosas que llegaron al país con el objetivo de ayudar a las personas. Las hermanas ayudan a personas enfermas, mendigas o a los huérfanos. Esta labor humanitario ha sido bien vista por los ciudadanos. Incluso los talibanes respetan a estas religiosas, ya que las ven como un símbolo de caridad y humanidad.
Las religiosas han sido una de las motivadoras de las conversiones al cristianismo en Afganistán; ya que muchos afganos han visto que uno de los principios del cristianismo es el amor al prójimo. Sin mencionar otros valores cristianos, como es caso del respeto a los demás y el buscar resolver las diferencias de forma pacífica, sin afectar a otros, ya que no importa la religión, todos somos hermanos.
Una vida placentera
Las personas que trabajan en el proceso de evangelización dentro del territorio, han declarado que aquellos que son convertidos, pueden notar una mejora en su calidad de vida. Al acabar con el odio dentro de su corazón y buscar la reconciliación con Dios y con sus hermanos afganos; han sentido como su corazón se llena de amor y bondad.
Se presume que no solo los ciudadanos comunes están pasando por este proceso de conversión. Varios políticos afganos han visto en el cristianismo una forma de vida. Y es que no importa el estatus social, o las ideologías políticas, todos se pueden beneficiar del amor infinito del creador.