San Juan de Capistrano. Santo que conmemoramos el día 23 de octubre. Fue un famoso franciscano napolitano que se dedicaría a predicar en gran parte de Europa. Nacido en Capistrano, reino de Nápoles en el año 1386.
A sus 26 años de edad, para el año 1412, saldría como jurista a ejercer el cargo en Perugia, y también sería gobernador de esta, por ordenes de Ladislao I de Nápoles. Cuando es hecho prisionero al momento en el que la ciudad es ocupada por quienes luchan contra Rímini, San Juan de Capistrano tomaría todo ese tiempo para reflexionar y hallar las verdades de su alma.
Entonces comenzaría la verdadera vida cristiana y franciscana de San Juan Capistrano, ya que se cree tuvo n sueño donde se le apareció San Francisco, pidiéndole ingresar a la orden. Su gran maestro sería San Bernardino de Siena.
Lo más memorable de este santo, fue su gran labor evangelizadora por Europa. Primero iría a Alemania, Austria, Hungría y Polonia. Se dedicaba principalmente a predicar en las plazas, para que todo el mundo pudiera verlo, y acudía un gran número de oyentes a conocerlo, siendo llamado “el santo predicador”.
San Juan de Capistrano conseguiría el apoyo de muchos jóvenes que decidieron unirse a sus misiones religiosas, cosa que motivaba mucho más a la gente que le escuchaba. Se generaría un gran fervor en la población, llevándolos a dejar atrás las prácticas impuras que no alimentaban al alma.
Durante la Cruzada contra el turco, más admirable que las victorias logradas con las armas, era la victoria espiritual que sólo San Juan llevaba a cabo. Consiguió convertir a numerosos cruzados en novicios, con quienes celebraba diariamente la Santa Misa, y habían numerosos soldados que pedían comulgar. Moriría un 23 de octubre del año 1456, durante la plaga de la peste que se había desencadenado en los campamentos.