San Celso y San Nazario vivieron en el siglo I d.C., durante los primeros años del cristianismo. Aunque no se conoce con exactitud la fecha de sus nacimientos, se sabe que ambos fueron discípulos de San Pedro, el apóstol y primer líder de la Iglesia cristiana.
Encuentro con San Pedro y su conversión al cristianismo
San Nazario era un ciudadano romano que se convirtió al cristianismo después de escuchar las enseñanzas de San Pedro en Roma. Fue entonces cuando se encontró con San Celso, un joven que estaba bajo su cuidado. San Nazario se convirtió en su mentor espiritual y lo instruyó en la fe cristiana.
Misiones y predicaciones
Una vez convertidos, San Celso y San Nazario sintieron el llamado a predicar el evangelio y llevar la palabra de Dios a otros lugares. Juntos, viajaron a través de Italia, Francia y España, compartiendo la buena nueva de Jesucristo y convirtiendo a numerosas personas al cristianismo. En su camino, enfrentaron persecuciones y dificultades, pero nunca se dejaron intimidar, confiando siempre en la providencia divina.
- Milagros y obras de San Celso y San Nazario
A lo largo de sus viajes misioneros, San Celso y San Nazario realizaron varios milagros y obras de caridad. Uno de los milagros más conocidos ocurrió en la ciudad de Milán, donde sanaron a una mujer paralítica que sufría desde hacía mucho tiempo. Este milagro, realizado en el nombre de Jesucristo, atrajo a muchas personas a la fe y confirmó la veracidad de sus predicaciones.
Martirio de San Celso y San Nazario
Durante el reinado del emperador Nerón, la persecución de los cristianos se intensificó en todo el Imperio Romano. San Celso y San Nazario fueron arrestados en Milán por predicar el cristianismo y llevar a cabo conversiones. Después de un juicio sumario, fueron condenados a muerte.
El día de su ejecución, ambos santos fueron llevados al lugar donde serían decapitados. Sin mostrar temor, enfrentaron su martirio con valentía y confianza en Dios.
Santoral del día 1 de abril:
- San Hugo de Grenoble: Obispo francés del siglo XI, fue conocido por su gran labor reformadora y por su vida de oración y austeridad.
- San Melitón de Sardes: Obispo y teólogo del siglo II, fue uno de los Padres de la Iglesia y escribió numerosos tratados sobre temas teológicos y exegéticos.
- Santa Valeria de Milán: Mártir cristiana del siglo II que sufrió el martirio junto a su esposo, San Vital de Milán, durante la persecución del emperador romano Marco Aurelio.
- San Macario de Gante: Obispo del siglo XI que fundó la abadía de San Bavón en Gante, Bélgica, y promovió la reforma de la vida monástica y la educación en su diócesis.