El 18 de julio se celebra la memoria de San Federico de Utrecht, Obispo. Su entrega mística lo llevó a la decisión de la Orden gloriosa para mantener el cristianismo en las personas. Además, formó parte de la comunidad de Países Bajos realizando actos humanitarios mediante los objetivos piadosos. Gracias a este Santo marcó la esperanza en las personas alejadas.
Posteriormente, el nombrado Santo sembró los conocimientos de las Escrituras Bíblicas dando inicio a los planes conmovedores en la devoción. Por otro lado, el Obispo es reconocido por destacar sus habilidades bondadosas y alivio de las enfermedades letales. Sin embargo, su esperanza se vio afectada en el triste martirio en presencia de Dios. Además, cumplió la paz.
El evangelio de San Federico de Utrecht
Nacido en la ciudad Frisia encontrado en Países Bajos hacía el año 790. Recibió educación bajo el seno de una familia noble que le orientaron en los valores de las figuras protectoras. Seguidamente, durante su juventud recibió aprendizaje por mentores de Iglesias Católicas siendo elegido Sacerdote y al tiempo Obispo formando parte como costumbre de Misas.
El martirio
Finalmente, la celebración ha sido un magnífico camino perfecto para reconocer la buena fe de Dios y mostrar firmeza en los buenos actos. Cabe destacar, el compañero cristiano fue muy humilde en su trabajo razón que guío nuevas normativas para el establecimiento de la esperanza. En conclusión, en el año 838 falleció en la tortura de golpes por dos ladrones.
Santoral del día 18 de julio
Este 18 de julio se festeja la obra de destacados hermanos santificados dentro del calendario religioso. Por consiguiente, lograron marcar los corazones de las personas hasta ser seleccionados líderes celebrados. Los compañeros son a continuación:
- Santa Teodosia, religiosa y crucificada
- Beato Juan Bautista de Bruselas, líder y torturado
- San Materno de Millán, gobernante fiel