La Iglesia Católica celebra el día 09 de marzo la conmemoración de nuestra apreciada Santa Francisca Romana, tras recibir la noticia del fallecimiento de su hijo y amado esposo, comandante de las tropas del Pueblo. La nombrada Santa mostró una fuerte empatía hacía los enfermos, intervino en el constante cuidado y alimentación. Fue reconocida por su increíble nobleza, simpatía, y dedicada al Señor.
Sus actos de protección generaron un gran culto por la Santa. Los narradores sienten satisfacción y emoción continua por ser un símbolo de respeto que obtiene la motivación, además de consolar a todos los enfermos. Santa Francisca Romana llevó una vida llena de cristianismo y desde pequeña deseo convertirse en monja, hasta encontrarse con compromiso del matrimonio.
Santa Francisca y su devoción
Nació en el año 1.834 en Roma, bajo el seno de una familia de altos recursos económicos y nobles. Fue bautizada en la Iglesia Basílica de Sant`Agnese, sus padres le tenían aprecio. Cuando era niña se comportaba noble. A los 13 años se encontró en la situación donde los padres le exigieron casarse con Lorenzo Ponziano un hombre muy reconocido, la misma acepto y al tiempo, se dedicó a la religión con la cuñada quien la indujo al mundo espiritual.
La visión milagrosa
Según la leyenda, Santa Francisca luego de varias catástrofes vividas, como el secuestro de uno de sus hijos, la misteriosa enfermedad que afecto a la misma, e inconvenientes que paso con discípulos. Llego un momento donde se mostró mal y una extraña luz empezó a brillar su rostro donde dijo sus últimas palabras. “«El ángel ha terminado su tarea y me manda que le siga». Razón que su muerte afecto al pueblo
Santoral del día 09 de marzo
En este día además se conmemoran otros hermanos religiosos. Destacados por sus numerosas obras, los siguientes son:
- Santa Catalina de Bolonia, gloriosa conmovedora
- San Paciano de Barcelona, protector religioso
- San Vital de Castronovo, compañero fiel