El día de hoy se conmemora a San Benito José Labre, nacido el 26 de marzo, en el año 1.748 en Amettes, Francia. Fue una santidad reconocida por ser un vagabundo quien falleció a sus treinta y cinco años el 16 de abril del año 1.783, este es considerado también como el patrono de los solteros, las personas sin domicilio y también los peregrinos o personas incomprendidas.
Benito José Labre fue el hermano mayor en una familia con quince hijos, este fue educado por su tío, el cura en Erín buscando que Benito se mostrara interesado en ingresar al seminario, para su sorpresa, Benito renuncia a convertirse en sacerdote debido al miedo que tenia de perder su alma para salvar a otras personas, esto causaría su rechazo en diferentes convenios como la Orden de la Trapa, buscando refugio en Cartuja.
La cadena de rechazos y la humildad de San Benito José Labre
Recibiendo el rechazo en Cartuja, por no conseguir la vocación indicada en la Orden, recibe nuevamente el rechazo en la Trapa, logrando conseguir aceptación de forma momentánea en la abadía de Sept-Fons en el año 1.769, su estadía allí es interrumpida al enfermarse, recorriendo múltiples locaciones, obtiene nuevamente una serie de rechazos por lo que decide encomendarse a predicar como mendigo a través de la peregrinación.
La mortificación en su obra santa
Decide ofrecer su predicado a todos los pobres que se cruzaban en su camino, volviéndose devoto a la Tercera Orden Franciscana, su voto de mortificación, sumado a la falta de higiene le llevo contraer parásitos, peregrino hasta Roma donde falleció y fue enterrado en la Iglesia de Santa María lo que genera una milagrosa manifestación de fe popular. Finalmente es canonizado el 8 de diciembre del año 1.881 por el Papa León XIII.