San Charbel Makhlouf fue un asceta y religioso nacido en Líbano, en Beqakafra, el 8 de Mayo de 1828. Fue también muy conocido como Sarbelino, Youssef Antoun, José Antonio o Sharbil Majluf. Fue un personaje sumamente renombrado en su región, ora por el ejemplo de vida que otorgó, ora por la cantidad de milagros que fueron registrados en su nombre. A la edad de 3 años, Chábel Makhlouf quedó huérfano de padre. Esto implicó que su madre tuviera que cuidarlo desde entonces, hasta que esta tuviera ocasión de casar con una persona que, tiempo después, se haría monje.
A la edad de 20 años, en 1851, el joven Charbel ingresa en un monasterio, en Mayfouq, como novicio. Fue un monasterio maronita en el que ingreso, recibiendo allí el nombre por el que sería recordado años y años más tarde. Fue también hasta Kfifnane, donde se intruyó diligentemente con su confesor, el santo Nimatullah Al-Hardini.
Sin embargo, sería en un monasterio maronita en Annaya donde San Charbel Makhlouf pasaría el resto de sus días. Sería donde haría sus votos solemnes, en 1853, y sería ordenado como sacerdote, en 1859. Se dice que San Charbel Makhlouf se destacó siempre por su devoción a Dios y Jesucristo, por una vida dedicada a orar, a ayunar y al martirio. Predicó con vocación, y se dice que tuvo el don de sanar a muchos enfermos. Esta fue una facultad que, según muchos devotos, siguió a después de su muerte.
Entre algunos de los milagros que se le suelen adjudicar, está la sanación milagrosa de Nouhad El-Chami, quien se curó de una mortífera hemiplejia. O el milagro de Iskandar Obeid, quien padeció de un terrible mal en el ojo, y que, por intersección de San Charbel, logra curarse completamente.
San Charbel Makhlouf muere un 24 de diciembre de 1898, en Annaya. Desde entonces el 24 de julio de el día de su celebración.
