San Isaías, también conocido como El Profeta o sencillamente Isaías, es el santo que se celebra el día 9 de mayo dentro del santoral católico. Aparte, es venerado también dentro del islam y creencias judeocristianas, incluyendo el judaísmo. Esto, se debe a que fue uno de los profetas más importantes de Israel, ya que pudo ver claramente con siglos de antelación el nacimiento y la gloria de Jesucristo.
San Isaías, nació en algún momento del año 765 a.C. y, a diferencia de muchos otros profetas, este poseía lazos fuertes con la realeza, de los reyes de Judá de aquella época. A su vez, era un hombre extremadamente culto, ya que era estadista, escritor, poeta y asesor político entre los reyes del momento.
Por otro lado, fue el autor del famoso Libro de Isaías, que aunque no se hace referencia directa a este, se le llama El Profeta. Aquí, predijo el futuro de las tierras de Israel y de otras situaciones entre los países de la época. Entre estas predicciones, resalta la del nacimiento del Emanuel, o lo que en hebreo se traduciría como “Dios con nosotros”. El impacto que produjo sus predicciones se hicieron notar en todo el continente, y sería haría mucho más famoso siglos después con el nacimiento, vida y sacrificio de Cristo.
A su vez, es este mismo impacto el que lo llevó a la tumba, dado que fue perseguido y presuntamente martirizando su vida por sus creencias y sus predicciones; así como también hablar ampliamente de la santidad y el mensaje de Dios, mientras que criticaba los errores del pueblo judío aseverando que en un futuro renacería Sion y Jerusalén de entre todos estos errores que se estaban cometiendo. Se dice que su martirio se produjo al ser cortado por la mitad bajo la orden del Rey Manasés en el año 695 a.C.