San Calixto Caravario. Fue un sacerdote italiano, considerado protomártir católico, al morir asesinado, no solo en la defensa de su fe cristiana, sino por cumplir un legado de protección pastoral. Es el santo que conmemoramos el 25 de febrero.
San Calixto Caravario, nació en Piamonte, Italia, el 8 de junio de 1903. Ordenado sacerdote en el año 1929 entraría a la orden de los salesianos, siendo su norte y regla de vida, su extenso amor a la eucaristía y a la predica cristiana, al punto de ignorar los sacrificios que implicarían una odisea en la cual estaba inmerso desde hacia un par de años, de viajar al continente asiático para predicar la palabra de cristo y evangelizar en poblaciones apartadas.
La vida ecuménica de San Calixto Caravario, estaría inspirada en San Francisco de Sales y orientada por el sacerdote Luis Versiglia, otro salesiano que, al igual que él, había decidido emprender su actividad pastoral cristiana en la región China de Lin Chow. San Calixto se trasladó a China para unirse a la labor pastoral ya iniciada en dicha región.
Cuando ambos santos se encontraban en una visita pastoral en el distrito de Lin Chow, en compañía de un grupo de maestros, catequistas y estudiantes, fueron atacados por grupos violentos de piratas idealizados políticamente, quienes, además de arremeter contra estos dos misioneros, forzaron y abusaron de las mujeres que se encontraban con ellos. La valentía de San Calixto Caravario se manifestó en defensa de la integridad física de las mujeres acompañantes de la misión cristiana, resultando todos vilmente asesinados por la barbarie de ese grupo delincuencial.
Este hecho, ocurrió en las cercanías de Li Tau Tseu, a orillas del río Lin Chou, el 25 de febrero del año 1930. El martirio de San Calixto Caravario fue reconocido por la Congregación de Causas de los santos del 13 de noviembre de 1976 y su nombre, fue elevado a la santidad en el año 2000, bajo el Papado de San Juan Pablo II, al igual que otros 119 mártires chinos.