Nos encontramos en la solemne celebración del santoral de la Virgen de los Ángeles, una fecha marcada por la devoción y el fervor que se manifiesta cada 2 de agosto. Esta fecha nos invita a reflexionar sobre la vida y los milagros de nuestra amada virgen, a sumergirnos en la profundidad de su historia y a honrar su beatificación y santidad.
La Virgen de los Ángeles, también conocida como «La Negrita», es una aparición mariana venerada en Costa Rica. Su historia remonta al siglo XVII, cuando una mujer indígena encontró una pequeña estatuilla de una madre con su hijo en un bosque cerca de la ciudad de Cartago. La estatuilla, a pesar de ser trasladada varias veces, siempre volvía milagrosamente a su lugar de hallazgo.
Esta historia dio inicio a la devoción hacia la Virgen, reconociéndola como la madre protectora y guía espiritual de todos los costarricenses.
Milagros de la Virgen de los Ángeles
La Virgen de los Ángeles ha sido asociada a innumerables milagros, curaciones y manifestaciones de fe. Desde la misteriosa aparición de su estatuilla, a las decenas de testimonios de creyentes que, en momentos de aflicción y necesidad, han experimentado su amorosa intervención. Es frecuente la historia de enfermos que, al acudir en peregrinación al santuario de la virgen en Cartago, experimentan mejoras significativas en su salud, siendo estos milagros atribuidos a la intercesión de la Virgen de los Ángeles.
Historia Cristiana de la Virgen de los Ángeles
Desde su aparición en 1635, la veneración a la Virgen de los Ángeles se ha expandido no solo en Costa Rica sino también en toda América Latina. En 1824, la Virgen fue declarada oficialmente como la patrona de Costa Rica, y desde entonces, cada año, cientos de miles de creyentes hacen una peregrinación al Santuario Nacional de Nuestra Señora de los Ángeles en Cartago. Esta tradición ha solidificado la presencia de la Virgen en la historia cristiana de la región, como un símbolo de fe y unidad entre los creyentes.
Beatificación y Santidad de la Virgen de los Ángeles
La veneración de la Virgen de los Ángeles como una figura santa es palpable en la devoción que se manifiesta en sus fieles. Su figura, su legado, y los milagros atribuidos a su intercesión se ven reflejados en la beatificación que le otorga la Iglesia Católica, y en el reconocimiento de su santidad por sus devotos.
Esta beatificación no es un acto burocrático, sino una afirmación de la creencia profunda de que la Virgen de los Ángeles continúa, hasta hoy, obrando milagros e intercediendo por nosotros en el cielo.
La vida, los milagros, la historia cristiana, la beatificación y la santidad de la Virgen de los Ángeles no son solo aspectos a ser recordados en su santoral, sino una invitación a profundizar en nuestra fe, a renovar nuestra devoción y a seguir su ejemplo de amor y servicio a los demás. Como hijos e hijas de la Iglesia, celebremos con gozo este día en honor a la Virgen de los Ángeles.
