Este 30 de septiembre se compra la obra de San Honorio de Canterbury. Noble hombre dado a la herencia del Señor quien trabajo inicialmente en el seno de la comunidad cristiana con el poder de monje de Roma. Posteriormente se convirtió en gobernante abad, por su gran esfuerzo y compromiso inigualable lo cual le permitió esbozar con orgullo la palabra del Señor. En su ejercicio se convirtió en una autoridad noble.
Con su ferviente deseo para servir, se ganó sus méritos en la iglesia de Dios, por lo tanto su festejo parte de un gran puñado de seguidores. Su fidelidad al santo se basa en su ejemplar construcción de conocimiento e imitación de directrices sagradas. Por su dependencia a las normas el santo ejerció presión por seguir adelante con las normas establecidas, ganando el respeto de sus superiores.
San Honorio de Canterbury y los cambios.
Pese a su desconocido origen, se destaca la importancia del santo establecido como un monje humilde y comprometido en la Iglesia de Dios. Si respeto fue tal, que se le envío con un gran grupo de seguidores de Dios para evangelizar a los ingleses y por lo tanto, este trabajo le permitiría aportar cambios. En el programa de enseñanza destacó volviéndose una figura importante en las lecciones.
Las recepciones generosas del santo
Considerando su esfuerzo, el humilde gobernante también destacaba en su generosidad. Sin dudarlo el santo distribuyo recursos para destacar la importancia del apoyo en grupo al ver los enfrentamientos sangrientos de los ingleses. Recibió el agradecimiento de los compañeros cristianos aliados, quienes le felicitaron por el apoyo. Finalmente el santo ascendió en la gloria del Señor marcando precedentes honorarios.
Santoral del día 30 de septiembre
Este día también permitió la celebración de diversos hermanos cristianos, destacados por su gran compromiso al Señor. Estos son algunos de los más destacados:
- San Jerónimo, apasionado presbítero
- Santa Teresa del niño Jesús
- Beato Juan Nicolás, gran fundador
- San Francisco de Borja, apasionado presbítero
