Este 30 de julio se conmemora la obra de Santa Godeleva, humilde esposa cuyo destino la llevo a convertirse en mártir tras sufrir los constantes ataques de su suegra y su marido, hasta partir tras el sabotaje de unos criados. Nacida en el año 1.049 en Belgica, fue entregada con apenas dieciocho años de edad ante un caballero flamenco cuyo nombre era Bertulfo de Ghistelles.
El matrimonio estaba lleno de constantes roces y tras un breve tiempo el caballero decidió abandonar a Godeleva, declarando que su matrimonio era casi inexistente tras el rechazo de la joven ante la inminente necesidad por consumar la unión por parte de Bertulfo. Enojado y humillado, el caballero castiga a Godeleva entregándola a la exsuegra, una mujer despiadada y cruel que veía a la joven como una esclava, dándole numerosos castigos.
La cruel acción contra Santa Godeleva
Cansada por los maltratos, la santa escapa al hogar de sus padres, resguardándose en la oración y pidiendo en nombre del Señor la redención de su esposo. Ante la inesperada acción de la joven, los padres de Godeleva buscaron a Bertulfo y rogaron por su perdón para que aceptara nuevamente a su esposa, ante tal acto el caballero acepto, pero conspiro para traerle desgracia a la santa al ordenarle a sus criados que la estrangularan y lanzaran su cuerpo en el pozo del castillo.
Los debates hacia su martirio
Partiendo de este mundo en el año 1.070, la muerte de Godeleva dejo con tal remordimiento a su esposo que este término el resto de su vida aislándose en un monasterio y encontrando la redención. Con los años el martirio de la santa ha sido motivo de debates ante la falta de evidencias, sin embargo, los milagros ocurridos alrededor del pozo donde falleció la han hecho canónica desde el año 1.084 por Urbano II.
