La Presentación de la Virgen María es una tradición cristiana que se celebra el 21 de noviembre y es de gran importancia debido a que se conmemora uno de los «misterios» de la escogida por Dios para ser la Madre de su Hijo.
La Vida de María
El origen de esta festividad litúrgica se encuentra en el Protoevangelio de Santiago, un libro apócrifo donde se narra la infancia de la Virgen María y el nacimiento de Jesús.
En este libro, los padres de María la llevaron al Templo de Jerusalén a la edad de tres años, para ser presentada junto a otras doncellas hebreas que llevaban lámparas.
La Virgen María fue llevada al templo y este hecho se narra como un suceso milagroso, debido a que al ser muy pequeña pudo subir las escaleras por su cuenta y fue recibida particularmente por el sumo sacerdote Baraquías.
A pesar de que la presentación de la Virgen María en el templo no está narrada en ninguno de los libros de las Sagradas Escrituras hay mucha información en los libros apócrifos con respecto al hecho.
Origen de la festividad
La festividad de la Presentación de la Virgen María, también conocida como la Consagración de la Virgen María o Presentación de calvos como nono, se originó por medio de la dedicación de la iglesia de Santa María la Nueva de Jerusalén en el año 543, de lo cual hay referencias históricas en la Constitución realizada durante el mando del emperador Comneno.
Posteriormente, en el año 1372, un canciller de la corte del rey de Chipre que fue enviado a Aviñón, le describió al Papa Gregorio XI la magnificencia con la que celebraban esta festividad en Grecia.
De manera que fue luego introducida en la tradición papal, y luego el Papa Sixto V que la impuso en todo Occidente.
