Santa Rictrudis de Marchiennes, es la santa que se celebra el día 12 de mayo dentro del santoral católico, y es venerada y notable debido a su vida de liderazgo, cristiandad y milagros.
Habiendo nacido en el año 614, en Gascuña, o en Perigord (un dato no muy claro debido a los registros históricos de la época), creció bajo el cuidado de padres cristianos que la criaron en la palabra de Cristo desde muy pequeña. Una vez crecida, estuvo cerca cuando ocurrió la rebelión del año 623 de Basconia, lo cual la llevó a conocer un noble que procedía de Francia, un hombre llamado Adalbaldo.
Una vez habiendo conocido a Adabaldo, estos se casaron oponiéndose a los deseos de la familia de Santa Rictrudis de Marchiennes. Bajo el lazo matrimonial de ambos, tuvieron a cuatro hijos, que posteriormente también se convertirían en santos como su madre, los cuales eran San Mauronto, Santa Closinda, Santa Eusebia y Santa Adalsenda.
Luego de varios años de felicidad entre la pareja y sus hijos, el padre iría al ducado de Basconia para ocuparse de asuntos importantes, pero a modo de venganza, los familiares de Santa Rictrudis de Marchiennes, que no aprobaban su relación, lo mataron debido a que veían a este como una traición debido a los enlaces nacionales que habían. Este noble, sería posteriormente canonizado debido a su vida.
Cuando la joven santa quedó viuda, el rey Clodoveo II, quiso insinuar casarse con ella, pero esta dio un rotundo no a sus avances la retirarse al monasterio de Marchiennes, que se encontraba dentro de Flandes, la cual ella misma había fundado cuando era una noble pudiente. Desde entonces se entregó a la vida de un santo, llegando incluso a ser abadesa y dando la palabra de Dios a todos aquellos que no la conocían. La mayoría de sus hijos también seguirían los pasos de su madre por el mismo monasterio luego de su muerte en 688.
