San Juan Bautista de la Salle. Padre confesor, fue un sacerdote, teólogo, pero, sobre todo, un destacadísimo pedagogo, educador de los jóvenes, nacido en Francia, en la ciudad de Reims, el 30 de abril de 1651. Sus aportes a la enseñanza y la pedagogía, especialmente de la juventud e infancia desposeída, son hoy por hoy, ejemplo y referencia educativa alrededor del mundo. Es el santo que conmemoramos el 7 de abril.
San Juan Bautista de la Salle, ordenado sacerdote y, siendo ya canónigo de la diócesis de Reims, renunció a su canonjía, para consagrarse totalmente a la educación de los niños pobres. Siendo descendiente de una familia adinerada y de buena posición social, este santo cristiano, optó por abandonar todos sus bienes materiales, repartiendo sus posesiones entre los más pobres y necesitados, para dedicarse por entero a una obra pedagógica y evangelizadora extraordinaria.
Con firme confianza en el amparo que le brindaría el espíritu santo y dotado de una fortalecida fe, Juan, fundó la Congregación de los Hermanos de las Escuelas Cristianas (Hermanos Lasalianos), quienes se extendieron rápidamente por el mundo entero. Siendo herederos de su espíritu, los Hermanos de La Salle, consagran su vida, al igual que su fundador, a la formación de los más jóvenes
San Juan Bautista de la Salle, fue un gran reformador de la pedagogía de la época, habiendo recibido a su cargo una pequeña escuela dirigida por las llamadas Hermanitas del Niño Jesús, se dedicó, en cuerpo y alma, a transformar la educación de aquellos jóvenes.
Creó una renovadora obra cristiana que, no solo se preocupó por la enseñanza masiva de niños y jóvenes de bajos recursos, sino que también, empleó un enfoque religioso admirable, de apreciación cristiana y amor infinito a Dios, que valió a San Juan Bautista de La Salle, el reconocimiento de todos quienes le siguieron y admiraron su obra en el campo de la pedagogía.
San Juan Bautista de La Salle, murió en Ruan, Francia, el 7 de abril de 1719. Fue canonizado por el Papa León XIII y Pio XII le nombró Patrono de los educadores de la juventud.
