Santa Eugenia. Fue una noble mujer Romana, convertida al cristianismo, nacida hacia el año 180. Padeció el martirio debido a su fe, muriendo decapitada en el año 258, presumiblemente en Alejandría. Es la santa que conmemoramos el 25 de diciembre.
Santa Eugenia, era descendiente de una familia de nobles en Roma. Se dice que su padre, de nombre Filippo, fue nombrado prefecto en Egipto, trasladando a su familia hacia Alejandría. Eran los años del emperador Galieno.
Ya para entonces, la palabra de nuestro señor Jesucristo, se difundía por toda Roma y eran los tiempos en los que, más y más pobladores, se convertían al cristianismo, convencidos de la esperanza de vida eterna. Santa Eugenia, mujer muy bondadosa y noble de espíritu, se encontraba comprometida en matrimonio, por imposición de sus padres.
Decide entonces, en concierto con dos de sus esclavos, convertirse al cristianismo y consagrar secretamente a Dios, su virginidad. Sin embargo, su entrega cristiana, corría peligro y, ante su compromiso forzado, decidió huir, utilizando vestiduras de hombre para evitar ser reconocida.
La huida de Santa Eugenia, la llevó a ocultarse en un monasterio para hombres, donde fingió ser uno de ellos, pero, un contratiempo se le presentó, cuando una mujer de la nobleza romana, quizá hechizada por su singularidad, trató de seducir a Santa Eugenia, quien obviamente, la rechazó, ocasionando la ira de esta mujer lujuriosa.
Santa Eugenia, bajo su falsa identidad, fue acusada de intento de abuso hacia la mujer Romana que, a su vez, había pretendido seducirla bajo su falsa apariencia de hombre, por lo que esta Santa mujer, fue acusada y llevada a juicio, ante su propio padre, quién debió descubrir la verdadera identidad de su hija y ante su destino condenatorio, decidió también abrazar el cristianismo.
En el año 258, en la fecha equivalente al 25 de diciembre, Santa Eugenia, fue decapitada por orden de Nicezio, prefecto de Alejandría. Los milagros ocurridos por intercesión de Santa Eugenia, no se hicieron esperar, siendo venerada tanto por la Iglesia Católica, como por la ortodoxa.