San Margarito Flores García. Nacido el 22 de febrero del año 1899, es el santo que conmemoramos el día 12 de noviembre. Desde muy joven, ya mostraría su gran deseo por pertenecer a la vida religiosa y cristiana.
A sus 14 años de edad, ingresaría al Seminario de Chilapa, a pesar de que sus padres se opusieron al principio, debido a falta de dinero, pero muchas personas que conocían la pasión del niño por la vida religiosa, aportarían para que pudiera cumplir su sueño, y San Margarito termina por ingresar al seminario en el año 1915 al cumplir los 15 años de edad, recibiendo la orden sacerdotal en el año 1924.
Con el tiempo, San Margarito ganaría el puesto como vicario de la parroquia de Chilpancingo, donde el santo fue respetado y muy querido, especialmente porque todos los viernes, se dedicaba a realizar misiones especiales por la parroquia, para atraer a más fieles a sus misas, que por cierto, recibían constantemente cientos de fieles quienes iban sólo a escuchar al santo.
En el año 1926, surge un conflicto religioso y debido a la persecución, San Margarito debe huir fuera de la diócesis, pero sentiría un profundo dolor al enterarse cómo tantos de sus hermanos morían en nombre de su fe, y él sentiría igual necesidad de dar su vida por Cristo.
Es así, como nuestro santo pide ser enviado a Atenango del Río, donde es apresado por las tropas, donde es despojado de todas sus pertenencias y dejado en roa interior, descalzo y atado a la caballería de los soldados, para luego obligarle a caminar bajo un sol tormentoso.
Cuando el santo suplicaba por agua, recibía golpes, y su tormento incrementaba. Finalmente, el 12 de noviembre del año 1927, se ordena su ejecución. Margarito pediría permiso para orar, y cuando se le concede, se arrodilló por unos segundos, oró en silencio y al ponerse de pie, recibiría una bala en la cabeza.
