San Juan Clímaco. Fue un Monje cristiano y maestro espiritual entre los siglos sexto y séptimo. Se presume su nacimiento para el año 575 en Siria. Es el Santo que celebramos el 30 de marzo
Su nombre “Clímaco” evoca a un famoso libro escrito por él, sumamente difundido durante la edad media, de nombre Escalera para Subir al Cielo, o la escalera del divino ascenso, cuyo significado, en griego, es Clímaco.
La vida de San Juan Clímaco, también conocido como Juan el Sinaita, se destacó por haberse internado por más de 40 años en el Monte Sinaí a orar y llevar una existencia entregada al ascetismo, como anacoreta, solitario y ermitaño, pero de entrega absoluta al ayuno, casi permanente y la meditación acerca de la Biblia, que lo llevó a ser uno de los más grandes sabios y conocedores de las sagradas escrituras.
San Juan Clímaco de igual modo fue muy apreciado, tanto por su sabiduría como por su capacidad para transmitir y llevar la paz a personas con almas afligidas y agobiadas, así como guiarlas hacia la santidad, el perdón, la purificación, la práctica de la fe, la esperanza y la caridad, todo lo cual plasmó en su famoso libro.
Su conexión espiritual y oración permanente, le valió a San Juan Clímaco el logro de prodigios milagrosos, como llevar abundantes lluvias tras largos períodos de sequía, plegarias y oraciones que realizaba subiendo a lo alto del Monte Sinaí.
A la edad de 70 años fue elegido Abad o Superior del Monasterio de Santa Catalina del Monte Sinaí, (monasterio de la transfiguración) construido al pie del monte, en el lugar donde Moisés habló con Dios, en el episodio bíblico de la zarza ardiente. Retirado en dicho Monasterio, murió nuestro santo a la edad de 80 años, presumiblemente el 30 de marzo del año 649.
