San Heriberto de Colonia, Santo y Obispo, es el Santo que celebramos el 16 de marzo. Nació en la ciudad de Worms, al sureste de Alemania hacia el año 970. Hijo del Duque Hugo de Worms fue criado bajo la fe cristiana, cursando estudios en la Abadía de Gorze y en la Catedral de su ciudad Natal.
Ordenado Sacerdote en el año 994, fue también fundador del Monasterio Benedictino y de la Iglesia de Deutz, ubicadas en Colonia, de la cual se convirtió en arzobispo hacia el año 999.
San Heriberto fue canciller de Otón III, emperador del Sacro Imperio Romano-Germánico entre 996-1002. Su vida fue ejemplar y se distinguió por una marcada humildad, la virtud y la predica del evangelio, a la cual instaba en todas sus acciones, así como también a practicar la bondad y caridad hacia los más pobres y necesitados.
Durante una gran sequía que azotó la ciudad de Colonia, que llevó la hambruna a este pueblo, nuestro Santo y Obispo organizó una gran procesión desde la Basílica de San Severino a la de San Pantaleón, exhortando a la gente a hacer penitencia y confiar en Dios. San Heriberto comenzó a orar fervorosamente y al concluir, una lluvia torrencial cayó sobre esta región que así fue salvada del hambre. La gente atribuyó a que sus oraciones y plegarias habían traído la lluvia.
Con el paso de los años, San Heriberto de Colonia se convirtió en el salvador, el amigo de todos y aliado de los pobres. Murió el 16 de marzo de 1021, siendo enterrado en la iglesia del monasterio de Deutz, donde es venerado.
Su proceso de canonización comenzó en el año 1073 con el papa San Gregorio VII, su culto se aprobó en el año 1175, fijando su fiesta para el mismo día de su fallecimiento, el 16 de marzo. Fue Canonizado de forma oficial en el año 1626 por el Papa Urbano VIII.
