Noticias Cristianas. Miles Jóvenes, acudieron a la Vigilia Cristiana de oración convocada por el arzobispo de Barcelona, Cardenal Juan José Omella, celebrada en la Iglesia de Santa María del Mar en dicha ciudad. La protagonista, una cruz que fue rescatada de la Iglesia San Simón de Bartella, en Mosul, Irak, tras ser profanada por el autodenominado Estado Islámico (ISIS), donde fue profanado también el cementerio cristiano de dicha localidad.
Cargados de fe cristiana, jóvenes en vigilia inician la Cuaresma
Tras la convocatoria hecha por Cardenal Omella, los asistentes, muchos de ellos jóvenes feligreses de origen iraquí y sirio, se congregaron para esta magnífica vigilia de oración y celebrar el inicio de la cuaresma bajo el título “Siente la Cruz” (Sent la Creu) ceremonia que fue presidida por la Cruz rescatada de la Iglesia Siro-Ortodoxa de San Simón de Bartella, en Mosul, saqueada y profanada tras los ataques sufridos en dicha ciudad por el grupo ISIS.
Unidos en Vigilia por tantos hermanos cristianos perseguidos
Con la premisa de profundizar el sentido Cristiano de la Cruz, el llamado fue a meditar sobre el sufrimiento y padecer de tantas personas en el mundo que sufren ataques y persecuciones por causa de su fe, y qué mejor celebración, que presidir la eucaristía en presencia de la Llamada Cruz de Mosul, cuya historia nos llama a la reflexión acerca de la crueldad, la intolerancia y el fanatismo desmedidos.
Durante la vigilia eucarística, Cardenal Omella nos recordó la necesidad de trasformar al mundo a través de un mensaje claro “Ama a tus enemigos y reza por los que te persiguen” tal como nos enseñó nuestro señor Jesucristo en su pasión y muerte en la cruz, con una misión cristiana que es fuente inagotable de Amor, Perdón y salvación.
Destacaron durante la ceremonia, la consagración de otros símbolos cristianos como un Cáliz y una Patena que muestra una perforación de bala y signos de deformación por el calor del incendio, objetos igualmente rescatados tras el ataque a la Iglesia de San Simón de Bartella, así como el testimonio, durante la Vigilia, de un joven sirio que huyó a causa de la guerra, y que contó su encuentro con Cristo a través del sufrimiento.