Noticias Cristianas. Desde el Vaticano, el Pontífice ha recibido este sábado a los miembros de la Federación Internacional de las Universidades Católicas y les ha pedido ayudar a estudiar a refugiados y favorecer materias para reflexionar sobre el drama que crea la inmigración.
En el discurso que ha dado el Papa, recuerda los cuatro principios que estableció él mismo en el pasado agosto, principios que formaron parte de su Mensaje para la Jornada Mundial del Migrante y del Refugiado del 18 de enero: “Acoger, proteger, promover e integrar”. Pidió entonces a las instituciones académicas, su máxima colaboración ante esta realidad.
Papa Francisco pide a las universidades católicas estudiar y analizar causas de la migración forzosa
“También es importante reflexionar sobre las reacciones negativas, a veces discriminatorias y xenófobas, que la acogida de los migrantes está suscitando en países de antigua tradición cristiana, para proponer itinerarios de formación de las conciencias”. Serían las declaraciones que también daría el Papa Francisco a las universidades católicas.
Ante esto, Francisco pide que se estudien “las causas remotas de las migraciones forzosas, con el propósito de establecer soluciones que se puedan comenzar a poner en práctica, aunque los resultados sea a largo plazo, pues es necesario en primer lugar asegurar a las personas el «derecho a no ser obligadas a emigrar”.
El Pontífice pide también un compromiso en cuanto a la enseñanza y la promoción social
Dentro del ámbito de la enseñanza, Francisco exhortó a que las universidades católicas “adopten programas dirigidos a favorecer la instrucción de los refugiados, a varios niveles, tanto a través de la oferta de cursos a distancia para aquellos que viven en los campos o en los centros de acogida, como de bolsas de estudio que permitan su recolocación”.
Para Finalizar, El Papa recuerda que las universidades católicas poseen un rol muy importante, pues son “conciencia crítica sobre las diversas formas de poder político, económico y cultural” por lo que tienen el deber de educar “a sus estudiantes, algunos de los cuales serán líderes políticos, emprendedores y creadores de cultura, en una lectura atenta del fenómeno migratorio, en una perspectiva de justicia, de corresponsabilidad global y de comunión en la diversidad cultural”.