Uno de los Ángeles más importantes en todas las religiones a nivel mundial. Junto con el Arcángel Miguel y con el Arcángel Gabriel ocupan un lugar en el reino de Dios y en la tierra.
Las emociones y la salud son características de vitalidad para cualquier ser humano. El Arcángel Rafael representa el balance entre estos dos aspectos, ofreciéndole una ayuda completa al mundo en plena devoción a Dios.
Rafael, guardián de la salud
Arcángel Rafael, ser divino y especial que su nombre representa “curación de Dios”.
Ayuda no solo la salud del cuerpo sino también la salud del alma enriqueciéndola y dotándola de paz, armonía y fe. Tiene el papel de sanador en la humanidad.
Representado por muchos artistas celebres como un peregrino con un bastón de lado que significa voluntad y apoyo espiritual para los más necesitados en el camino de la vida.
Vestido de color verde, color de la naturaleza y la esperanza eterna. Rafael, asociado a la ecología y la madre tierra por su poder de sanador y curación. Apoya en todos los aspectos al ser humano ayudado por los elementos de la tierra.
Su espíritu sanador y curador que le otorgó Dios Padre Todopoderoso le permite ayudar a entender a las personas que el cuerpo es un espíritu que debemos cuidar con gran amor y atención.
Ángel de gran devoción de paz y tranquilidad velando por la salud y seguridad de las personas principalmente las que poseen un mal y no pueden desenvolverse mejor, dándoles la oportunidad de afianzar la fe divina con su ayuda desinteresada.
Oración al Arcángel Rafael
Es momento de aceptar la curación de Dios Padre por medio del Arcángel Rafael.
Orarle y hacernos devotos a sus enseñanzas divinas y celestiales, con fe y amor dejando atrás todo lo negativo acumulado en nuestras vidas.
San Rafael, abogado de los enfermos y desamparados, cuidador de los perdidos y guía para la sanación y purificación en cuerpo y alma.
«Glorioso Arcángel San Rafael,
medicina de Dios,
guíame (o guía a…) en este viaje
de aprendizaje y purificación,
ayúdame (o ayuda a…) a reconocer
las lecciones que me (le) liberen
de todas mis (sus) culpas, preocupaciones y pensamientos negativos.Sé guía en el camino de la salvación,
en ruta al Amor Divino,
para ver reflejado en toda la creación,
el poder de regeneración y curación de Dios.Te ruego que seas compañero en este viaje por la vida
y un apoyo constante con la autoridad que representa tu cayado.
Rodéame (Rodea a…) con el verde esperanzador y sanador de tu capa,
y derrama tu medicina de luz sobre todo mi (su) ser.Gracias amado arcángel Rafael,
por tu amor sanador y compañía curativa,
en este sagrado peregrinaje del cuerpo,
para encontrar la unión con el alma,
según la voluntad divina,
de manera perfecta,
para el bien de todo el mundo,
y bajo la gracia de Dios.Amén»
Arcángel Rafael, versículos en la Biblia
Su presencia no se encuentra registrada en las santas escrituras de la Biblia, se informa que el Libro sagrado de Tobías nos cuenta en varios capítulos las hazañas y apariciones del Ángel sanador.
Su primera aparición se presenta al hijo de Tobit, Tobías con la intención de acompañarlo a un viaje de sumo riesgo el cual cuyo objetivo era conseguirle un esposa, la cual era Sara, que no había tenido suerte en el amor por culpa de un demonio que la acosaba y no la dejaba ser feliz.
Se hace compañero y guía de Tobías, para acompañarlo en todo el camino.
“Tobías salió a buscar un buen guía que conociera el camino para ir con el a media. Afuera encontró a al Ángel Rafael, que estaba de pie frente a él y sin sospechar que era un Ángel de Dios…” (Tobías 5-4).
Lo acompaña en todo su camino, lo introduce en la casa de Sara, liberándola del demonio y otorgándole a los la purificación de su alma, trayéndole paz y amor verdadero.
Mencionado en varios libros apócrifos judíos, Ángel es designado al primer día de la semana, ya que representa la luz. Es el Ángel que sana las enfermedades y las heridas de todos aquellos que lo necesiten, y purifica el alma en presencia de Dios Todopoderoso.