Arbolitos, San Nicolás, el espíritu de la Navidad, los reyes magos, regalos y demás accesorios navideños. ¿Cómo se supone que sea la navidad del cristiano? Con esto no se quiere colocar una posición en contra de la otra, sino observar el origen de las festividades decembrinas y lo que realmente es el centro de la navidad.
El origen de la fecha de navidad
No se sabe con exactitud qué día nació Jesús. Investigaciones científicas llevadas a cabo con olfato a través de la historia, han dejado abiertas múltiples posibilidades. Entonces, ¿por qué celebrarla navidad el 25 de diciembre? La respuesta va en torno a la sustitución de una fiesta pagana por una festividad cristiana, a medida que la religión tomó fuerza, cuando fue proclamado religión oficial del Imperio Romano bajo el gobierno de Constantino.
La fecha de la navidad sustituye así la fiesta pagana del Sol Invictus, situándose precisamente en el día de un acontecimiento astronómico especial: el solsticio.
La festividad religiosa frente a la nueva fiesta pagana
Se pudiera decir que, la navidad actual se ha convertido en una fiesta pagana. La mayoría de las personas está pensando sólo en aspectos materiales, comprar regalos, comer y consumir bebidas alcohólicas e irse de vacaciones.
La verdadera navidad cristiana es, festejo y alegrías, pero de recatado gasto y teniendo como centro la figura de Jesús que nacerá como cualquier otro niño. Hay países, como en Venezuela, en que la novena de preparación se festeja con celebraciones litúrgicas especiales.
¿Qué hacer ante dos navidades en el mismo planeta? Lo primordial es no permitir que nos agobien las preocupaciones por el tener, ya sea bienes materiales, dinero, o actividades que signifiquen un derroche de dinero. Y más importante aún: preparar el corazón a través de la oración para recibir personalmente a Jesús en la vida personal, dando testimonio de su amor a quienes más los necesitan.
